Sí a la prost...digo a la Constitución.
Quién me mandó venir aquí se remanga las brazos (o las mangas) y pone cara de mala leche para entrar de lleno en el apacible ring de la política nacional e internacional. Como siempre, al píe del cañón o de píe frente al cañón, como querais.
Estamos de acuerdo, esa cosa que vamos a votar bajo el gracioso título de Constitución Europea es una auténtica basura. Los que hemos tenido la suerte de ojearla lo sabemos bien. En efecto no he tenido ni las ganas ni el valor de leerme semejante tostón entero y menos en francés, pero para eso están los párrafos en negrita y los resúmenes, a falta de una buena contraportada, esa olvidada fuente de erudición. Estamos de acuerdo, es una cuerdo de mínimos que para franceses y alemanes manejen el cotarro más a gusto mientras los medianos nos sentimos importantes y los pequeños se sientene seguros. Estamos de acuerdo, una vez más, en que el texto roza lo que se podría considerar una tomadura de pelo. Pero a pesar de todo ello, yo abogo por el sí.
No deja de ser llamativo que desde los medios de la ultraizquierda y la ultraderecha (en efecto, para alimentar mi esquizofrenia soy asiduo lector de Libertad Digital y de Rebelión.org que es una bonita forma de ver la irrealidad desde todos sus puntos de vista) se llame al voto por el NO. En efecto, al final todos terminan por desenmascararse y los enemigos de la libertad acaban encontrándose. No me refiero ya a la Libertad como idea (que también) sino a la nuestra libertad en concreto. Poruqe suele pasar que la ultraderecha tipo losantiano constituida en vocera de la democracia cristiana postfascista que se reparte una parte de Europa no oculta sus simpatñias por amigos de los derechos humanos y la democracia (democracia, qué cosas digo) como el Augusto Pinochet a la vez que aplauden como coro de alumnos pelotas todas las gracejas bélicas del señor Bush o del emperador (a poder ser republicano) de turno. Del otro lado suele coincidir que la ultraiziquierda neomarxista, vocera de la social democracia postcomunista que se reparte la otra parte de Europa no oculta sus simpatías por amigos de los derechos humanos y la democracia (democracia, mira que me repito) como el Fidel Castro (oye, que nombres más proclives al juego de palabras tienen estos dos cabrones) a la vez que aplauden cual coro de sodomitas deseosos las gracejas victimistas del jeque sanguinario de turno. Por su parte, con voceros como estos a social (robo legal) y cristiano (qué decir a estas alturas) demócratas no les hace falta mostrar sus verdaderas inclinaciones y se pueden dedicar a poner sonrisilla institucional con "vote sí, por ahí me llevo esos fondos de Bruselas" mientras hacen de submarino en el mismo seno de la Unción Europea (ruego disculpen estos arrebatos de chispa). Pues sí, paranoicamente pienso que el primer antieuropeísta de todos es el proetarra Giscard, responsable de esta patraña de texto, con la clara esperanza de una victoria del no a partir de la cual podrán desmantelar lo poco que hemos avanzado hacia la unificación y tener el argumento para entregarnos de la parte de unos al tito Sam y de la parte de otros, a falta de una buena utopía socialista con la que putearnos, a algo así como un emirato libre asociado.
En consecuencia, los deseos pacifistas son muy bonitos, pero la realidad es que medio mundo clavaría placentero su diente en la vieja Europa, y un montón de revoltosos postmodernos dándose de palos entre ellos resulta bastante atractivo. Votar, votaremos una mierda, pero votemos sí si no queremos darle la razón a los que guardan otros intereses. Si quereis, a falta de que alguien le eche el valor para levantar una casa en condiciones, quedémonos con esta tienda de campaña, mejor que con la intemeprie y las alimañas.
Estamos de acuerdo, esa cosa que vamos a votar bajo el gracioso título de Constitución Europea es una auténtica basura. Los que hemos tenido la suerte de ojearla lo sabemos bien. En efecto no he tenido ni las ganas ni el valor de leerme semejante tostón entero y menos en francés, pero para eso están los párrafos en negrita y los resúmenes, a falta de una buena contraportada, esa olvidada fuente de erudición. Estamos de acuerdo, es una cuerdo de mínimos que para franceses y alemanes manejen el cotarro más a gusto mientras los medianos nos sentimos importantes y los pequeños se sientene seguros. Estamos de acuerdo, una vez más, en que el texto roza lo que se podría considerar una tomadura de pelo. Pero a pesar de todo ello, yo abogo por el sí.
No deja de ser llamativo que desde los medios de la ultraizquierda y la ultraderecha (en efecto, para alimentar mi esquizofrenia soy asiduo lector de Libertad Digital y de Rebelión.org que es una bonita forma de ver la irrealidad desde todos sus puntos de vista) se llame al voto por el NO. En efecto, al final todos terminan por desenmascararse y los enemigos de la libertad acaban encontrándose. No me refiero ya a la Libertad como idea (que también) sino a la nuestra libertad en concreto. Poruqe suele pasar que la ultraderecha tipo losantiano constituida en vocera de la democracia cristiana postfascista que se reparte una parte de Europa no oculta sus simpatñias por amigos de los derechos humanos y la democracia (democracia, qué cosas digo) como el Augusto Pinochet a la vez que aplauden como coro de alumnos pelotas todas las gracejas bélicas del señor Bush o del emperador (a poder ser republicano) de turno. Del otro lado suele coincidir que la ultraiziquierda neomarxista, vocera de la social democracia postcomunista que se reparte la otra parte de Europa no oculta sus simpatías por amigos de los derechos humanos y la democracia (democracia, mira que me repito) como el Fidel Castro (oye, que nombres más proclives al juego de palabras tienen estos dos cabrones) a la vez que aplauden cual coro de sodomitas deseosos las gracejas victimistas del jeque sanguinario de turno. Por su parte, con voceros como estos a social (robo legal) y cristiano (qué decir a estas alturas) demócratas no les hace falta mostrar sus verdaderas inclinaciones y se pueden dedicar a poner sonrisilla institucional con "vote sí, por ahí me llevo esos fondos de Bruselas" mientras hacen de submarino en el mismo seno de la Unción Europea (ruego disculpen estos arrebatos de chispa). Pues sí, paranoicamente pienso que el primer antieuropeísta de todos es el proetarra Giscard, responsable de esta patraña de texto, con la clara esperanza de una victoria del no a partir de la cual podrán desmantelar lo poco que hemos avanzado hacia la unificación y tener el argumento para entregarnos de la parte de unos al tito Sam y de la parte de otros, a falta de una buena utopía socialista con la que putearnos, a algo así como un emirato libre asociado.
En consecuencia, los deseos pacifistas son muy bonitos, pero la realidad es que medio mundo clavaría placentero su diente en la vieja Europa, y un montón de revoltosos postmodernos dándose de palos entre ellos resulta bastante atractivo. Votar, votaremos una mierda, pero votemos sí si no queremos darle la razón a los que guardan otros intereses. Si quereis, a falta de que alguien le eche el valor para levantar una casa en condiciones, quedémonos con esta tienda de campaña, mejor que con la intemeprie y las alimañas.
3 comentarios
Alkarrabia -
No quiero por menos que decir para quien lo va a poner en duda luego que el que subscribe no es ni independentista ni anarquista, a lo mas, un ingenuo postmoderno simpatizanate del asamblearismo y de la Libertad.
Y os aseguro que esta mierda de burrocrática constitución de la Unión no va ni de lo uno ni de lo otro.
La idea de democracia representativa que subyace en el texto se basa fundamentalmente en crear un inmenso aparato burocrático-institucional al servicio de las estrategias económicas y políticas de los estados centrales y del modelo económico neoliberal moderado que representan Alemania y Francia.
El coste de este aparato de la Union no nos reportará mayor libertad, representatividad ni democracia, sino simplemente mayor burocracia; magma donde el individuo puede perderse y anularse completamente alienado en un mega país de pensamiento único y fronteras culturales y económicas varias.
El parlamento europeo que tan distantelemte se supone que representa la voluntad de la ciudadanía europea carecerá con esta constitución de cualquier vigencia en la toma de decisiones, ya que esencialemente gobernarán el Consejo de ministros, nombrado a dedo por los gobiernos de los estados miembros, y las inmensas comisiones, nombradas en función de "su valía e independencia", es dicir, más a dedo todavía. En la mayoría de los casos el Parlamento apenas tiene caracter consultivo y un derecho muy sui generis a la "moción de censura", que seguramente nunca aplicará.
Asi las cosas las políticas europeas no las van a decidir los ciudadanos europeos sino cuatro o cinco presidentes y una Comisión de burócratas.
Ahora, sí consigues más de un millón de firmas de distintos países de la Uniín te darán permiso para sugerir al inoperante Parlamento que tome en consideración tu propuesta (con la que inmediatamente después se limpiarán el culo los parlamentarios). He aquí la democracia representativa.
El Banco Central de la Union (es decir un BundeschBank ampliado con nuestros impuestos) decidirá la linea económica de las políticas europeas, anulando oportunamente cualquier decisión que pueda tomar en esta materia otro parlamento democraticamente elegido por cualquier país o estado europeo.
La Agencia de Defensa Europea se inscribirá directamente en la Organización del Atlántico Norte, siguiendo sus lines generales de actuación estratégica y apoyando obligatoriamente cualquier decisión que tome. Es decir una OTAN-ADE ampliada, en la que los estados miembros quedaremos vinculados a la estrategia militar anglo-estadounidense per secula seculorum. Así mismo se instará a la Unión a crear las bases estratégicas de desarrollo industrial para fortalecer la defensa. Es decir un ingente aparato militar-industrisl, similar al de los EUA que dirigirá la Agencia Europea de Defensa. Una política de rearme al servicio de la OTAN. Sigan por tanto los pacifistas del No a la Guerra de las juventudes zetapeístas apoyando estas bonitas políticas de paz de independencia respecto al amigo americano. Puro postureo falso.
Expuestas mis razones, completamente parciales y manipuladas, como todos ya supondreís viniendo de un radical libertario, he decidico abogar por el NO a esta Constitución.
Prefiero rechazar una constitución dañina para los europeos y promover la realización de otra realmente democrática. Abogo por una Europa Unida, abierta al resto del mundo, que defieda la democracia consesuada a nivel político y empresarial, la libertad de todas las personas, incluídas las no europeas, la igualdad económica y la justicia social para tod@s.
Deseoso de que nuestros representantes en el Parlamento Euroeo se ganen el sueldo insto a su presidente Josep Borrell a que me represente y proponga una cosntitución democrática para los ciudadanos y los pueblos del Viejo Mundo.
Salut a todas y a todos!!
Vive la Republique des Europeéns Livres!!
Visquen als pobles lliures de Europa!!
Miguel. -
Por otra parte,yo, que no estoy convencido de nada, comprendo la psotura de mis amigos anarquistas colectivistas (aunque no comprendo por qué son colectivistas)pero creo que con el NO le dais alas a algunos alos que seguro no os gustaría dar alas.Lo dicho, ala.
Alakarria Lliure!! -
Vista, leída, busbrayada y comentada con mis conocidos más inetelectuales y sesudos... (es decir Miguelín y mi casero, ambos anarquistas radicales) abogo unanimemente por el NO a esa mierda.
Luego te cuento mis razones... k se me ha acabado la hora del locutorio!!!